Este página fue desarrollada en 2017. Algunos conceptos y contenidos aquí publicados requieren una actualización. Próximamente comenzaremos a trabajar en la revisión de los contenidos, así como también en la nueva política de privacidad de la web.

Ley 14.783 – Cupo Trans (2015)

Ley 14.783 – Cupo Trans (2015)
23 mayo 2017 Identidad & Diversidad

Esta ley, por medio de su Artícu­lo 1º esta­ble­ce una pro­por­ción míni­ma a ocu­par por par­te del colec­ti­vo trans, se deter­mi­na de la siguien­te manera:

ARTÍCU­LO 1°: Obje­to. El Sec­tor Públi­co de la Pro­vin­cia de Bue­nos Aires, debe ocu­par, en una pro­por­ción no infe­rior al uno por cien­to (1%) de la tota­li­dad de su per­so­nal, a per­so­nas tra­ves­tis, tran­se­xua­les y trans­gé­ne­ro que reúnan las con­di­cio­nes de ido­nei­dad para el car­go y esta­ble­cer reser­vas de pues­tos de tra­ba­jo a ser exclu­si­va­men­te ocu­pa­dos por ellas, con el fin de pro­mo­ver la igual­dad real de opor­tu­ni­da­des en el empleo público.”

Por medio de esto, se ins­tau­ra el cupo trans en la pro­vin­cia de Bue­nos Aires. A su vez, el Artícu­lo 6º trae a cola­ción el prin­ci­pio de no discriminación:

ARTÍCU­LO 6°: No dis­cri­mi­na­ción. Toda per­so­na tie­ne dere­cho al tra­ba­jo digno y pro­duc­ti­vo, a con­di­cio­nes equi­ta­ti­vas y satis­fac­to­rias de tra­ba­jo y a la pro­tec­ción con­tra el des­em­pleo, sin dis­cri­mi­na­ción por moti­vos de su iden­ti­dad de género.”

En este sen­ti­do, es intere­san­te des­ta­car el con­cep­to de la dis­cri­mi­na­ción posi­ti­va o de accio­nes afir­ma­ti­vas de carác­ter tem­po­ra­rio, sien­do esto con­cor­dan­te­men­te con la Obser­va­ción Gene­ral Nº 20 del Comi­té de DESC en su par­te pertinente:

9. Para erra­di­car la dis­cri­mi­na­ción sus­tan­ti­va en oca­sio­nes los Esta­dos par­tes pue­den ver­se obli­ga­dos a adop­tar medi­das espe­cia­les de carác­ter tem­po­ral que esta­blez­can dife­ren­cias explí­ci­tas basa­das en los moti­vos prohi­bi­dos de dis­cri­mi­na­ción.  Esas medi­das serán legí­ti­mas siem­pre que supon­gan una for­ma razo­na­ble, obje­ti­va y pro­por­cio­na­da de com­ba­tir la dis­cri­mi­na­ción de fac­to y se dejen de emplear una vez con­se­gui­da una igual­dad sus­tan­ti­va sos­te­ni­ble.  Aun así, algu­nas medi­das posi­ti­vas qui­zás deban tener carác­ter permanente…”

De esta mane­ra, se demues­tra que en deter­mi­na­das oca­sio­nes estas medi­das posi­ti­vas, se tra­ta indi­rec­ta­men­te de una “dis­cri­mi­na­ción posi­ti­va”. Este con­cep­to entra en esce­na cuan­do exis­te una dis­cri­mi­na­ción de fac­to e his­tó­ri­ca que mar­gi­na­li­za a un gru­po, y que, para poder sope­sar esta reali­dad vigen­te, es el Esta­do quien debe tomar las medi­das de inclu­sión para pri­vi­le­giar a un gru­po determinado.

En este caso, la medi­da es por medio del esta­ble­ci­mien­to de una ley de cupo que le per­mi­ta la inte­gra­ción del colec­ti­vo trans, fomen­tan­do que esta pobla­ción sal­ga de la oscu­ri­dad y entre al cir­cui­to for­mal de tra­ba­jo, que hoy en día – en los hechos – se les es nega­do a la hora de bus­car tra­ba­jo. Esto no obs­ta el prin­ci­pio de ido­nei­dad vigente.

Este tipo de legis­la­ción es cla­ve para mejo­rar la cali­dad de vida del colec­ti­vo trans por lo tan­to se reco­no­ce su importancia.