Legislación provincial

En el nivel sub­na­cio­nal es muy difí­cil esta­ble­cer una línea evo­lu­ti­va cla­ra que com­pren­da las dis­tin­tas situa­cio­nes pro­vin­cia­les. Cada una tie­ne su pro­pio cuer­po nor­ma­ti­vo, el cual difie­re del de las otras. En algu­nos casos, cier­tas pro­vin­cias toda­vía cuen­tan con leyes dis­cri­mi­na­to­rias sobre algu­nos colec­ti­vos, inclu­yen­do a las per­so­nas LGBTIQ. En otros casos, aun cuan­do no se detec­te nor­ma­ti­va dis­cri­mi­na­to­ria, no hay leyes que las pro­te­jan en for­ma espe­cí­fi­ca. Por últi­mo, hay pro­vin­cias que cuen­tan con un esce­na­rio más favo­ra­ble ya que no sólo no cuen­tan con nor­mas dis­cri­mi­na­to­rias, sino que han dic­ta­do leyes que bus­can pro­te­ger a las per­so­nas per­te­ne­cien­tes al colec­ti­vo de diver­si­dad sexual.
Esta varie­dad de esce­na­rios mues­tra el amplio aba­ni­co nor­ma­ti­vo en el nivel sub­na­cio­nal. Las nor­mas nacio­na­les pre­sio­nan de algu­na for­ma a las pro­vin­cias en la detec­ción y solu­ción de cier­tos pro­ble­mas, pero su auto­no­mía les per­mi­te disen­tir en muchos casos.

A con­ti­nua­ción, se pre­sen­ta el esta­do de situa­ción de la nor­ma­ti­va vigen­te en el nivel sub­na­cio­nal, hacien­do hin­ca­pié en las nor­mas dic­ta­das por cada pro­vin­cia que inci­den en dis­tin­tos aspec­tos de la vida de las per­so­nas LGBTIQ.

Semáforo legislativo

Cada pro­vin­cia está repre­sen­ta­da con un color,
de acuer­do a su nivel de pro­tec­ción normativo.