Carta a la Asamblea General en materia de promoción y protección de derechos humanos (2008)

La Car­ta diri­gi­da al Pre­si­den­te de la Asam­blea Gene­ral por los repre­sen­tan­tes per­ma­nen­tes de la Argen­ti­na, el Bra­sil, Croa­cia, Fran­cia, el Gabón, el Japón, Norue­ga y los Paí­ses Bajos ante las Nacio­nes Uni­das (2008) fue pre­sen­ta­da el 22 de diciem­bre de 2008, en el sexa­gé­si­mo ter­cer perío­do de sesio­nes de la Asam­blea Gene­ral. La mis­ma se encuen­tra diri­gi­da al pre­si­den­te de la Asam­blea y es fir­ma­da por Jor­ge Argüe­llo (Argen­ti­na), Maria Lui­za Ribei­ro Viot­ti (Bra­sil), Neven Juri­ca (Croa­cia), Jean-Mau­ri­ce Ripert (Fran­cia), Ema­nuel Isso­ze-Ngon­det (Gabón), Yukio­Ta­ka­su (Japón), Mor­ten Wetland (Norue­ga) y Frank Majoor (Paí­ses Bajos). Tie­ne carác­ter de decla­ra­ción de dere­chos de orien­ta­ción sexual e iden­ti­dad de géne­ro. En total con­tó con el apo­yo de 66 Esta­dos miembros.

La decla­ra­ción, cuyo nom­bre com­ple­to es “Car­ta a la Asam­blea Gene­ral en mate­ria de pro­mo­ción y pro­tec­ción de dere­chos huma­nos: cues­tio­nes rela­ti­vas a los dere­chos huma­nos, inclui­dos dis­tin­tos cri­te­rios para mejo­rar el goce efec­ti­vo de los dere­chos huma­nos y las liber­ta­des fun­da­men­ta­les (2008)”, cons­ti­tu­ye una mani­fes­ta­ción de preo­cu­pa­ción, a la vez que con­de­na la vio­len­cia, el aco­so, la dis­cri­mi­na­ción, la exclu­sión, la estig­ma­ti­za­ción y el pre­jui­cio basa­dos en la orien­ta­ción sexual y la iden­ti­dad de género.

Ini­cial­men­te fue pro­pues­ta como una reso­lu­ción. Sin embar­go, al no haber alcan­za­do el quó­rum nece­sa­rio, se deci­dió uti­li­zar el for­ma­to de decla­ra­ción. En la mis­ma sesión, el voce­ro sirio leyó una con­tra decla­ra­ción en la que 57 paí­ses se mani­fies­tan en con­tra de la des­pe­na­li­za­ción de la homosexualidad.

En línea con la nor­ma­ti­va inter­na­cio­nal en mate­ria de dere­chos huma­nos, resul­ta rele­van­te la mani­fes­ta­ción de volun­tad por par­te de la Argen­ti­na de velar por el reco­no­ci­mien­to de los dere­chos del colec­ti­vo LGBT.