Este instrumento muestra acciones concretas que dan cuenta del compromiso tomado en Naciones Unidas para poder abordar la temática de los derechos humanos, la identidad de género y la orientación sexual.
La medida más concreta tomada es la de nombrar, por un período de tres años, a un Experto Independiente sobre la protección contra la violencia y la discriminación por motivos de orientación sexual o identidad de género, y encomendarle un mandato.
Dicho mandato tiene por objeto analizar la normativa internacional para ver sus logros y deficiencias, concientizar a las poblaciones en relación a la violencia contra el colectivo de diversidad sexual, entablar diálogo con los Estados en miras a erradicar la violencia y discriminación, realizar trabajo en cooperación a los fines de alcanzar estos objetivos, hacer frente a las múltiples violencias sufridas por el colectivo y hacerse referente en términos de asesoramiento técnico y de lucha contra las violencias mencionadas.
Ante esto, es interesante destacar que el primero Experto independiente de Naciones Unidas contra la violencia y la discriminación a las personas LGTB (Vitit Muntarbhorn, de nacionalidad tailandesa).
El hecho de haber instaurado este mandato y haber designado un experto independiente de Naciones Unidas resulta un gesto de suma importancia que refleja la trascendencia que se le está comenzando a dar a la temática. Sirve en relación a la visibilización de la cuestión, dado que las funciones del experto implican el análisis normativo, la concientización social, y mucho más aún, la interacción con Estados y organizaciones de la sociedad civil para poder cooperar en la erradicación de los altos índices de violencia sufridos por orientación sexual e identidad de género a lo largo del mundo. Seguramente, entre las actividades del experto se encuentre la de realizar informes y relatorías que servirán para fijar estándares internacionales para la protección de derechos del colectivo.
Debido lo reciente de esta medida (el mandato se está ejecutando en el actual 2017), aún no se pueden prever el impacto que tendrá, sin embargo, sí se puede considerar un paso interesante que permitirá más reconocimiento de derechos.